El 16 de Junio de 2014 se preguntaba Duao Barroso, Presidente de la Comisión
Europea de quién era la culpa de la crisis en España, o sea, la actual Espanistán de los reinos de
taifas autonómicos, que comenzó a manifestarse en 2008.
Dijo que cuando desde la CE preguntaban al Banco de España que como iban
las cosas con las Cajas de Ahorro, sobre las que había ciertos rumores poco
favorables en lo mercados, el Banco de España respondía que iban pefectamente.
Es decir, está acusando al banco central regulador español de falta de
control sobre lo que pasaba en las Cajas o de mentir. Algo que ya es sabido
pero Barroso se ha atrevido a decirlo en voz alta.
Cuando el Gobierno socialista del PSOE dirigido por ZP nombró como
Gobernador del Banco de España al conocido como MAFO, un hombre de partido, dio
lugar probablemente a que el banco regulador se plegara al Gobierno que lo había
nombrado.
Y cuando las Cajas de Ahorro alimentaban la burbuja inmobiliara y la
corrupción relacionada con ella en las Autonomías, el Banco de España no se
enteraba o miraba para otro lado.
Que no se enterase es difícil, dado el volumen de créditos enorme que
las Cajas estaban dando para operaciones sobre el suelo y la construcción de
viviendas a precios sobrevalorados. Las advertencias era numerosas desde
diferentes analistas.
Es el problema de que el poder político nombre a gente dócil con ellos
para dirigir los órganos reguladores, porque entonces éstos no cumplen su función
y los disparates no se corrigen a tiempo.
No obstante también habría que meditar sobre el papel del Banco Central
Europeo. Dadas las cifras de endeudamiento privado que se estaba produciendo en
España, el Banco Central Europeo debió haber dado la voz de alarma y haber
presionado para que el Banco de España hiciera su trabajo de informar de la
realidad.
El caso es que cuando el partido socialista PSOE perdió las elecciones generales en España en Noviembre de 2011 había en el país una burbuja inmobiliaria enorme y la mayoría de las Cajas de Ahorro acabaron arrasadas. Eran entidades financieras públicas controladas por los poderes políticos regionales y los sindicatos. Y todavía hay grupos de izquierda que apuntan como solución la nacionalización de la banca, es decir, que sea pública como eran las Cajas. Vivir para ver.
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